Cómo el movimiento anti-sistema está beneficiando a las contiendas locales
Puede el término “down-ballot” race te resulte familiar en este año electoral. Para quienes no están familiarizados con la política, este término hace referencia a las contiendas locales que aparecen en la parte inferior de la boleta electoral, donde usualmente se enlistan las oficinas en disputa, descendiendo de nacional a local.
¿Por qué es este término tan relevante en 2016?
El éxito de Bernie Sanders y Donald Trump, candidatos que se oponen al sistema, no sólo han atraído un número récord de votantes “no tradicionales” a las elecciones primarias, votantes que no son tan predecibles como los afiliados a un partido político, y quienes además están teniendo una gran influencia en las “down-ballot” races.
Hasta el momento, los candidatos que no han bailado al son de la música de los partidos son quienes se han visto beneficiados por este fenómeno.
Pero, ¿Qué podría pasar en una contienda entre dos candidatos demócratas donde ninguno es considerados parte del sistema?
Estamos por conocer la respuesta con el Distrito 39 de la Asamblea de California, donde el anterior Asambleísta Raúl Bocanegra se está enfrentando a la Asambleísta incumbente Patty López, quien de hecho le ganó su puesto en 2014.
Cómo llegó a darse el enfrentamiento entre dos candidatos ajenos al partido es una historia interesante.
Bocanegra representó al Distrito 39 de la Asamblea de California del 2012 al 2014. Durante su mandato, Bocanegra, nativo del Valle de San Fernando, trabajó por construir una coalición de mentes independientes en la Asamblea, quienes pudieran hacer frente al sistema partidista.
Se creía que su asiento en la Asamblea estaba seguro, particularmente por ser su distrito altamente demócrata. Por ello, Bocanegra se concentró en hacer campaña por candidatos demócratas moderados en otras áreas del Estado, quienes permitieran mantener viva su coalición.
Resulta que esto fue un gran error. Bocanegra fue vencido por la novata Patty López por un pequeño margen, en una elección que sorprendió a la comunidad política.
Lo irónico es que Bocanegra fue un gran partidario de la Propuesta 14, la cual permite a los californianos votar por cualquier candidato en las primarias estatales, sin importar su afiliación política, y donde los dos candidatos con más votos (de cualquiera de los partidos) avanzan a la elección general.
Fue precisamente esta reforma la que permitió se diera la batalla electoral Demócrata vs. Demócrata, que enfrentó por primera vez a Bocanegra con López.
Prop. 14 fue un gran paso para aumentar la democracia en California y la habilidad de los ciudadanos de participar en cada etapa de la elección. Bocanegra entendió que incluso si no parecía estar en el mejor interés del partido, estaba en el mejor interés de los votantes de California.
Ahora, Bocanegra se encuentra contendiendo de nuevo por el Distrito 39, retando a la incumbente Patty Lopez y utilizando su experiencia para atraer a los votantes:
“Estoy contendiendo para la Asamblea Estatal porque los residentes y los pequeños negocios del Noreste del Valle de San Fernando merecen un líder con experiencia que de los mejores resultados para nuestra comunidad.” Raúl Bocanegra declaró en Facebook - 28 de Abril
La elección entre dos candidatos que no son considerados como parte del sistema crea una paradoja interesante: alinearse con el sistema y arriesgarse a perder el “voto Bernie” o construír una colación que contemple votantes republicanos, independientes y demócratas opuestos al sistema.
Sin importar que pase, este fenómeno es lo que va a definir la elección de AD 39, y el candidato que tenga mayor dificultad en navegar las aguas independientes, probablemente se hundirá con su barco.